RELATO Había una vez una colina, una colina repleta de toda clase de especies, especies animales que conviven en unión y armonía. Lazarot era el paraíso, el paraíso que solo unos pocos tenían el privilegio de visitar y quedarse por el resto de sus vidas. Eso era todo lo que se veía por fuera claro está, pero como todo, nada es perfecto. En los páramos más oscuros de la colina, en un pequeño desagüe, se encontraba el pequeño y pobre Pablo, una pequeña y triste cucaracha que no tenía amigos y vivía en constante soledad. Sus padres habían sido, hace mucho tiempo atrás, los primeros y únicos criminales que habían existido en Lazarot. La pobre cucaracha pagaba el precio del pecado de sus padres. Pero un día, apareció un perro, llamado Nico, ese día en ese mismo instante se conocieron, dos seres totalmente distintos, pero al mismo tiempo iguales, se volvieron inseparables. Pasó el tiempo y todo era perfecto . No obstante, como toda historia tiene su tragedia y una tarde de muchas en las